Escandinavia durante la era vikinga, desde aproximadamente el año 800 hasta el 1050 d.C., se caracteriza por poderosos magnates (o jefes) y reyes. El título de rey no se hereda, luchas por él.
El magnate principal es reconocido por los demás como “el primero entre iguales”. Cuatro magnates ahora luchan por Herrlof: la victoria y los elogios obtenidos en la guerra. ¿Quién se convertirá en el próximo rey vikingo?
En este juego de mesa, tu objetivo es ser el primer jugador en alcanzar cincuenta puntos o más: el jugador con más puntos gana. La partida se juega en un máximo de diez rondas (aunque la mayoría de las veces los jugadores alcanzarán fácilmente cincuenta puntos antes) de quince cartas.
Escandinavia durante la era vikinga, desde aproximadamente el año 800 hasta el 1050 d.C., se caracteriza por poderosos magnates (o jefes) y reyes. El título de rey no se hereda, luchas por él.
El magnate principal es reconocido por los demás como “el primero entre iguales”. Cuatro magnates ahora luchan por Herrlof: la victoria y los elogios obtenidos en la guerra. ¿Quién se convertirá en el próximo rey vikingo?
En este juego de mesa, tu objetivo es ser el primer jugador en alcanzar cincuenta puntos o más: el jugador con más puntos gana. La partida se juega en un máximo de diez rondas (aunque la mayoría de las veces los jugadores alcanzarán fácilmente cincuenta puntos antes) de quince cartas.
Escandinavia durante la era vikinga, desde aproximadamente el año 800 hasta el 1050 d.C., se caracteriza por poderosos magnates (o jefes) y reyes. El título de rey no se hereda, luchas por él.
El magnate principal es reconocido por los demás como “el primero entre iguales”. Cuatro magnates ahora luchan por Herrlof: la victoria y los elogios obtenidos en la guerra. ¿Quién se convertirá en el próximo rey vikingo?
En este juego de mesa, tu objetivo es ser el primer jugador en alcanzar cincuenta puntos o más: el jugador con más puntos gana. La partida se juega en un máximo de diez rondas (aunque la mayoría de las veces los jugadores alcanzarán fácilmente cincuenta puntos antes) de quince cartas.
1 valoración en Herrlof (Español – Destroquelado – Nerea Santiso)
Valorado en 3 de 5
Carryy –
Es un buen juego de cartas si no haces mucho caso al sistema de puntuación en sí mismo… Me explico, me parece buen juego, pero no creo que haga falta llegar a los 50 puntos que pide para ganar puesto que son muchas rondas para mi gusto y me acaba cansando y pareciendo monótono. Sin embargo, jugar un mejor de 3 rondas mejora mucho la experiencia.
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Carryy –
Es un buen juego de cartas si no haces mucho caso al sistema de puntuación en sí mismo… Me explico, me parece buen juego, pero no creo que haga falta llegar a los 50 puntos que pide para ganar puesto que son muchas rondas para mi gusto y me acaba cansando y pareciendo monótono. Sin embargo, jugar un mejor de 3 rondas mejora mucho la experiencia.
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Carryy –
Es un buen juego de cartas si no haces mucho caso al sistema de puntuación en sí mismo… Me explico, me parece buen juego, pero no creo que haga falta llegar a los 50 puntos que pide para ganar puesto que son muchas rondas para mi gusto y me acaba cansando y pareciendo monótono. Sin embargo, jugar un mejor de 3 rondas mejora mucho la experiencia.
NO DISPONIBLE
Carryy –
Es un buen juego de cartas si no haces mucho caso al sistema de puntuación en sí mismo… Me explico, me parece buen juego, pero no creo que haga falta llegar a los 50 puntos que pide para ganar puesto que son muchas rondas para mi gusto y me acaba cansando y pareciendo monótono. Sin embargo, jugar un mejor de 3 rondas mejora mucho la experiencia.